La vida está llena de incertidumbre. Dependiendo del temperamento y la personalidad, algunos luchan más con la incertidumbre que otros.
Podemos sentirnos inciertos sobre el futuro, sobre nuestra salud o sobre un tema social. Podemos sentirnos inciertos sobre tantas cosas, situaciones e incluso personas. Sin embargo, en una vida llena de incertidumbres, es tan reconfortante saber que podemos estar seguros de esto: las promesas de Dios y su amor por nosotros.
¿Pero cómo saber que puedes confiar en ellas?
Porque cuando Dios dice algo, lo dice en serio. La Biblia está llena de hermosas promesas. Aunque Dios hizo estas promesas a personas que vivieron hace mucho tiempo, también son para ti y para mí. Sus promesas, al igual que Él, son eternas. Ahora, solo porque las promesas están ahí, no significa que nunca vamos a experimentar dificultades. Desafortunadamente, debido al mundo en el que vivimos, ese no es el caso.
Mi promesa bíblica favorita se encuentra en Isaías 43:2
“Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.”
Dios nunca promete que no tendremos que atravesar fuegos o pasar por ríos. Él promete que cuando lo hagamos, no nos ahogaremos y no nos quemaremos, porque Él está con nosotros en todo momento. Él es la certeza a la que podemos aferrarnos cuando las cosas son inciertas.
Puedes enfrentarte a todo lo que te resulta incierto hoy sabiendo que un Dios poderoso camina contigo. En cada paso del camino, a través de cada cambio y sorpresa que la vida te presente, Él está allí. Como dice una de mis canciones de adoración favoritas:
“Más alto que los montes que enfrento Más fuerte que el poder de la tumba, constante en la prueba y el cambio Esta única cosa permanece”
Y esa única cosa es Su amor infalible por ti.